Terpel cumple 15 años de operaciones en Ecuador

Terpel es una compañía colombiana con más de 50 años de trayectoria en el campo de la comercialización de combustibles. En el marco de su decimoquinto aniversario de operaciones en Ecuador, su gerente general Germán Ramírez conversó con Patiotuerca acerca de los logros obtenidos, así como de los proyectos futuros de la empresa.

¿Cómo se dio la incursión de Terpel en el mercado ecuatoriano?

En su proceso de crecimiento, en el 2006 la empresa decidió incursionar en mercados internacionales y el primero de ellos fue Ecuador, por la cercanía geográfica y por ser un país petrolero. En aquel año adquirimos la operación de Texaco y en el 2018 la de Exxon Mobil.

¿Cuáles son las líneas de negocio de Terpel?

La más visible y de mayor volumen es la comercialización de combustibles a través de 107 estaciones de servicio, a nivel nacional. El año pasado comercializamos 187 millones de galones de combustible, que nos dio un 11% de participación de mercado. A través de una línea industrial también proveemos de combustibles a los sectores petrolero, minero, camaronero, etc.

Otra línea de negocio importante es la de lubricantes, ya que tenemos la distribución exclusiva de la marca Mobil en Ecuador. Adicionalmente están nuestros servicios de conveniencia, que son las tiendas de las estaciones de servicio. Si bien este es un negocio menor, complementa la propuesta de valor para el cliente.

¿Cuál es el balance de los 15 años de presencia de Terpel en Ecuador?

Si bien la adquisición de Texaco en el 2006 y la de Exxon Mobil en el 2018 nos permitieron crecer, no es un secreto que el negocio del combustible en Ecuador tiene una rentabilidad baja porque los precios están regulados. Sin embargo, esa situación está cambiando y nosotros la estamos acompañando con un plan de expansión agresivo.

Este año esperamos sumar ocho estaciones a nuestra red y seguramente participaremos para adquirir o afiliar a las estaciones de Petrocomercial que el Gobierno hace poco anunció que venderá. Eso nos dará un nuevo impulso para crecer.

¿Resulta conveniente la paulatina eliminación de los subsidios a los combustibles para las empresas que están en el negocio de la venta de derivados de petróleo?

Terpel apoya la gestión de los gobiernos de los países donde opera, y está de acuerdo con que en Ecuador se elimine el subsidio de manera gradual para que los consumidores se adapten a la nueva realidad y nos acerquemos a los precios internacionales. Pero el margen de utilidad de las comercializadoras aún no se ha tocado y sigue siendo el mismo en centavos por galón.

Hoy las comercializadoras estamos en una peor posición porque, por ejemplo, el precio del diésel se ha incrementado en más de un 50% y ahora debemos destinar más recursos para comprar la misma cantidad de galones y ganar lo mismo que antes.

Sin embargo, sabemos que el primer paso es liberar los precios y después habrá que tratar el tema de los márgenes de ganancia de las comercializadoras, que actualmente es poco rentable.

¿Qué planes tiene Terpel en Ecuador a partir de su aniversario 15?

Queremos convertirnos en líderes del mercado en comercialización de combustibles y en lubricantes, pero también queremos acompañar la transformación energética hacia la movilidad alternativa. De hecho, somos un actor importante en electromovilidad en Chile y Colombia, ya que proveemos de energía a los sistemas de transporte público de Santiago y Bogotá y también tenemos electrolineras privadas.

Estamos decididos a participar en la transformación de la movilidad y en la descarbonización de la industria a través de energías alternativas. Estamos calificando una estación de servicio en Guayaquil para tener nuestra primera electrolinera en Ecuador este año.

Hay quienes pensarán que eso es como darnos un tiro en el pie, pero no podemos quedarnos afuera del proceso de transformación energética. Preferimos participar en ese proceso que es irreversible y seguir siendo un jugador de ese sector.

¿Cómo ve el futuro del negocio de los derivados del petróleo en la región?

El cambio todavía va a tomar algún tiempo. Estimamos que en el 2050 empezará a decaer la curva de consumo de hidrocarburos. Sin embargo, ya hay iniciativas privadas y gubernamentales para acelerar el proceso de cambio hacia la electromovilidad.

Hasta el año pasado no había incentivos para comprar un vehículo eléctrico porque el combustible era barato. Ahora, con los precios de la gasolina y el diésel acercándose a niveles internacionales, con los precios de las baterías a la baja y con los incentivos arancelarios de los vehículos eléctricos, su adquisición se vuelve más atractiva.

Sin embargo, los hidrocarburos no solo mueven al sector automotor. También impulsan a muchas otras industrias, por lo cual su consumo no declinará en un lapso muy corto.

El aniversario 15 de Terpel viene acompañado de un cambio de imagen. ¿Qué implica y cuál es el objetivo?

El cambio de imagen implica la adopción de un nuevo logotipo y nuevos colores para las marquesinas de las estaciones de servicio y las tiendas. Venimos trabajando en esto desde hace un par de años y ya está presente en el 40% de nuestros establecimientos. Es un proceso paulatino por los costos que implica, y esperamos completarlo en dos años más.

Buscamos diferenciación, tener la mejor infraestructura en los países en los que operamos y transmitir a los clientes de que la inversión en imagen se traduce en la provisión de buenos productos y servicios. Queremos que un proceso tan rutinario como cargar combustible en un vehículo se convierta en una experiencia memorable.